La abdominoplastia es un procedimiento ideal para dar firmeza y aplanar el abdomen, sin embargo no hay garantías de que el paciente pueda aumentar de peso, hay que tener en cuenta que la abdominoplastia no es un procedimiento para bajar de peso.
Los pacientes que se practican esta cirugía deben continuar con un estilo de vida saludable basada en una dieta sin excesos y rutinas de ejercicios, según mis recomendaciones. Un estilo de vida renovado no sólo ayudará a evitar que el paciente aumento de peso después de la intervención, sino que el ejercicio es fundamental para su recuperación y para tonificar los músculos.
Una rutina diaria de 30 minutos de ejercicios alternados ayudará a mantener esa nueva figura que querrán lucir por siempre. La actividad física después de una abdominoplastia o de cualquier cirugía de contorno corporal contribuirá significativamente a la recuperación y ayudará a reducir la inflamación del área intervenida.
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