Es la zona del cuello donde se evidencia primero el envejecimiento de la piel y los cambios asociados a la edad. Empieza a notarse con la resequedad de la piel se vuelve más delicada y parecen finas líneas que hacen cambiar la apariencia de esta área.

Sin embargo, podemos retrasar dichos efectos de la edad, si desde ahora se asume hábitos de cuidado para la piel.

1.Protector solar: Siempre reitero la importancia del protector solar a diario. No sólo aplicarlo en el rostro, también hay que tener en cuenta el cuello, sobre todo porque esta piel puede arrugarse con mayor facilidad.
2.Masajeadores: son ideales para estimular la circulación, favoreciendo la firmeza de la piel del cuello, generando cambios positivos en su aspecto.
3.Procedimientos no quirúrgicos: son una excelente alternativa para renovar el aspecto del cuello con tratamientos no invasivos recomendados por mí.  

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